La Virgen de Peñarroya ayer en su carroza                        Foto: GACETA

Paulino Sánchez

   Un aguacero estuvo a punto estuvo de suspender la procesión que cierra los actos y cultos en honor a la Virgen de Peñarroya, que se han venido celebrando desde el 7 al 23 de septiembre, primero con la romería, luego con la Semana de Exaltación, el Ofrecimiento y el novenario con el que concluyen las actividades. En la mañana del domingo se celebró la Solemne Función Religiosa, último día del novenario, que se ha dedicado cada uno de los días a un barrio de la localidad y que el último era el de la Plaza Mayor.

   Por la noche, una repentina tromba de agua cayó sobre la localidad minutos antes de la hora prevista para la salida de la imagen, pero finalmente y con el suelo mojado, comenzó la procesión que abría la cruz parroquial, Banda Municipal que bajo la dirección de Ángel Sancho interpretó diferentes marchas, banderas que bailaron los encargados de hacerlo, así como la representación de las directivas de las diferentes cofradías y hermandades de la localidad.

   Varios fieles acompañaban en filas a la Virgen, así como los alabarderos, que escoltaban a la carroza en la que la imagen aparecía engalanada con su manto blanco y en la cabeza la corona imperial, además de numeroso adorno floral. Delante de la imagen marchaban la capitana Mari Carmen Jaime, así como las directivas de las cofradías de la Virgen de Peñarroya, tanto de La Solana como de Argamasilla de Alba y la de la Virgen de las Viñas de Tomelloso.

   Detrás de la carroza los sacerdotes de la parroquia de Santa Catalina, así como el nuevo párroco de Argamasilla de Alba y los alcaldes de La Solana y de Argamasilla de Alba, además de concejales de los grupos socialista y popular solaneros. Una vez que la imagen llegó al pórtico principal de la parroquia de Santa Catalina, era Benjamín Rey el que ofrecía la última homilía del novenario, recordando el hermanamiento entre los dos pueblos que veneran a la Virgen de Peñarroya, cerrándose los cultos con la interpretación del Himno y de la Salve dentro del templo.