La imagen de la Virgen de Fátima durante la procesión                                                                   Foto GACETA  

Paulino Sánchez

   La procesión con la imagen de la Virgen de Fátima cerró los cultos y actos que se han organizado en el barrio de su nombre con motivo de esta festividad mariana y que han sido organizados por la Junta de vecinos que preside Pascuala González-Horcajo.

   En la noche del lunes se oficiaba la misa en la puerta de la pequeña capilla en la que permanece la imagen a lo largo de todo el año. Era el vicario de Santa Catalina, Francisco Maestro, el que la oficiaba y pronunciaba la homilía, recordando diversos aspectos relacionados con la devoción a la Virgen María, en este caso bajo la advocación de Fátima.

   La parte musical corría a cargo del coro y rondalla Santa Cecilia, del Centro de Mayores, que interpretó diferentes temas religiosos a lo largo de la celebración. Asimismo en el ofertorio le fueron presentadas al sacerdote un ramo de flores, dulces, una vela, así como el pan y el vino de la consagración.

Concluida la misa daba comienzo el desfile procesional, que encabezaba el estandarte, acompañando diferentes fieles que alumbraban con velas traídas desde Fátima especialmente para este día. Asimismo acompañaban representantes de cofradías y hermandades de la localidad y la Virgen realizó el recorrido en su carroza, adornada con numerosas flores, realizando un amplio recorrido por diferentes calles de la barriada.

Al concluir los actos la presidenta Pascuala González-Horcajo, se mostraba satisfecha de la asistencia a los mismos, sobre todo a los cultos religiosos, aunque pedía más devoción hacia la Virgen a los vecinos del barrio, señalando que es el principal motivo de la celebración el conmemorar la fiesta de la Virgen.

Sobre la presencia de la lluvia, señalaba Pascuala González-Horcajo, que aunque la mayor parte de los días han contado con una temperatura totalmente veraniega, en la tarde del domingo, precisamente el de la Virgen de Fátima cayó un fuerte aguacero. Al respecto recordaba que cuando la Virgen se apareció a los pastorcillos se originó una fuerte tormenta.