La preocupación en el CADIG "El Pilar" es máxima                                   Foto: GACETA

      Aurelio Maroto

         Caras serias, preocupación, incertidumbre… y un gran cartel con el lema “Queremos quedarnos” junto a las fotografías de sus inquilinos, 27 discapacitados profundos que también sienten, a su modo, que algo no funciona en su nueva casa. El Centro de Atención a Discapacitados Intelectuales Graves “El Pilar” cerrará sus puertas si no recibe ayuda económica de manera urgente, y esa ayuda sólo puede venir de la Junta. Toda la comunidad del centro, que apenas lleva un año funcionando, ha lanzado un SOS para advertir de su extrema dificultad para seguir adelante por falta de recursos económicos, una situación que se arrastra desde hace meses y se agrava por momentos. La Junta comprometió 750.000 euros para 2011 y no ha llegado nada, de manera que el Ayuntamiento de La Solana ha tenido que adelantar 1,2 millones, pero ya no puede poner más por que ni siquiera está pagando a sus funcionarios, como es sabido.

         En rueda de prensa, el presidente del Comité de Empresa del CADIG, Manuel del Hierro, leyó un comunicado donde explicó hasta qué punto necesitan auxilio. Los 27 residentes actuales son personas con grandes necesidades asistenciales, psicosociales y sanitarias. Del Hierro expresó el orgullo que siente por los logros conseguidos en este año de trabajo “logros que han cambiado las vidas de personas que llevaban años sin salir a la calle, sin dar un abrazo y que habían olvidado sonreír”. En su opinión, esos avances dan fuerza para seguir luchando por la igualdad y la integración.

         Pero ese compromiso puede romperse si no llega dinero. El CADIG ha seguido funcionando “gracias al esfuerzo de los proveedores en el suministro de productos, al apoyo municipal y al aguante de sus 50 empleados sin cobrar sus nóminas. El centro ha establecido un duro plan de ahorro interno, pero no es suficiente. Del Hierro confirmó que el mayor problema ahora es mantener el abastecimiento básico “si no suministran comida, productos de limpieza, luz o calefacción sería imposible continuar”.

         Esta rueda de prensa llegó después de una reunión del Comité de Empresa con los tres grupos políticos municipales, PSOE, PP e IU, y los sindicatos CCOO y UGT “mostrando una total unanimidad a la hora de apostar por el futuro del CADIG”. Atendiendo a ese consenso –añadió- “solicitamos una respuesta o compromiso de los responsables autonómicos para asegurar el futuro inmediato y la continuidad del CADIG”.

         El alcalde, Luis Díaz-Cacho, arropó con su presencia este llamamiento y dijo que la Junta será responsable directa del cierre del CADIG si llegara a producirse “es un proyecto en el que creo, pero el Ayuntamiento ya no puede adelantar más dinero; no seremos nosotros quienes cerremos el CADIG”.