Fachada de la Casa de la Encomienda, sede de la UP        Foto: GACETA

           Aurelio Maroto

         La Universidad Popular continúa siendo un referente cuando se trata de organizar el ocio y tiempo libre, y también la formación de muchos solaneros. Los datos, como el algodón, no engañan. Se superarán las 800 matrículas en este ciclo de invierno, que comienza el 10 de octubre. Se trata de un récord absoluto de alumnos en el cuarto de siglo largo de vida la UP solanera.

         La amplia oferta de cursos y talleres a celebrar entre octubre y febrero ha tenido una respuesta extraordinaria, mayor si cabe en materias relacionadas con la formación como informática, mecanografía audiovisual, inglés, contabilidad o cuidadores no profesionales. El desempleo, por desgracia, ha ayudado a impulsar un poco más el interés por ampliar conocimientos en mucha gente, y la UP ofrece esa posibilidad. Las mujeres siguen siendo una inmensa mayoría.

         En declaraciones a Radio Horizonte, la directora del centro, Amalia Romero de Ávila, admite estar “sorprendida” por la gran demanda de este ciclo “no esperábamos tantas matrículas en los primeros días”. Esta vez, la gente ha madrugado más que nunca buscando hueco en cursos como restauración, mecanografía o informática, algunos de los más solicitados. También han tenido gran aceptación algunas novedades como los monográficos.

         En cualquier caso, lo que no varía es el perfil del alumno. La coordinadora, Francisca María Serrano de la Cruz, explicó que el alumno tipo sigue siendo mujer, ama de casa y cada vez más desempleadas que llegan en busca de formación para mejorar sus posibilidades profesionales para encontrar empleo. Las nuevas tecnologías se llevan la palma en este sentido y las plazas se cubren en seguida. También hay inquietud por aprender a manejar un ordenador “muy útil para encontrar recetas de cocina, abrir carpetas o pedir cita médica, por ejemplo”. Otro taller útil es el de pequeñas reparaciones domésticas donde la gente aprende a arreglar un enchufe, poner una bombilla o arreglar un grifo.

         Aunque muchos cursos ya están completos, otros todavía están por cerrar el cupo. De hecho, aunque el plazo de matrícula expira el 30 de septiembre, el alta de matrículas continuará goteando en los próximos días.