Los alcaldes de Villarta, San Carlos y Carrizosa, tras el pleno                                      Foto: GACETA

Gabriel Jaime

La Mancomunidad La Mancha ha recurrido a una operación de crédito para solventar las nóminas de sus trabajadores. La falta de ingresos procedentes de los Ayuntamientos adheridos, y especialmente de la Junta de Comunidades, han propiciado esta maniobra calificada por su presidente como “balón de oxígeno”.

El préstamo es de 90.000 euros y fue aprobado en el Pleno de la institución, celebrado en su sede de La Solana. Permitirá poner al día los pagos a sus 13 empleados y tener algo más de liquidez. Así lo afirmó el recién reelegido presidente, José Torres, con la esperanza de que pronto se pueda recuperar la normalidad con los ingresos que hay pendientes de cobrar. Y es que, en condiciones normales, y si se regulariza la situación, la Mancomunidad la Mancha tendría una liquidez de entre 80.000 y 100.000 euros, pero ese dinero pendiente no termina de llegar. Es por eso que se recurre al crédito.

Torres aseguró que la Mancomunidad no corre ningún peligro, esperando en cualquier caso que no haya más recortes y que no afecte a los trabajadores. Al respecto, se mostró rotundo tras haber sido reelegido como presidente para otros cuatro años más el pasado 17 de agosto.

La situación actual se veía venir desde el mes de marzo, cuando los ingresos de la Junta de Comunidades comenzaron a retrasarse. Torres aseguró que los Ayuntamientos han aportado todo lo que han podido durante este tiempo, si bien con eso no es suficiente.

         En el Pleno de la Mancomunidad también se aprobó la salida de las localidades de Manzanares y Membrilla, aunque con matices. En el caso de Manzanares, su Ayuntamiento ha hecho efectivo todos sus atrasos y deja la institución con sus compromisos económicos cumplidos. Sin embargo, Membrilla todavía debe abonar una cantidad que frisa los 15.000 euros, en concepto de cuotas y otros apartados.