Paulino Sánchez

La Oficina Municipal de Información al Consumidor ha iniciado una campaña de información, dirigida principalmente a los jóvenes, para que hagan un uso correcto de las redes sociales, avisando de lo bueno y lo menos bueno que tienen, pero siempre intentando hacer un uso adecuado de las mismas.

El director de la OMIC, Santiago García Cervigón, pasó por Radio Horizonte para ofrecer datos sobre esas redes, según un estudio realizado por el Observatorio Juvenil de Consumo de Castilla La Mancha, destacando el desarrollo acelerado que han experimentado en los últimos dos años.

El informe revela que en 2008 utilizaban las redes sociales el 22,5 por ciento de la población, mientras que los datos del 2010 se elevan al 71,5 por ciento de una forma fija, además de otro 13 por ciento ocasional. Al respecto, indicaba que “las redes sociales ocupan ya el 20 por ciento del tiempo que los usuarios están en Internet”. El año pasado, unos mil millones utilizaban en todo el mundo las redes sociales, en las que navegan ya un 83 por ciento de los jóvenes.

García Cervigón se refería a las ventajas e inconvenientes que tienen esas redes, y advirtió del peligro que puede suponer subir fotos en las mismas “algo que debe estar restringido a los amigos y familiares”. Y es que las redes sociales son algo positivo, sobre todo en determinados países donde está limitada la libertad de expresión, así como la posibilidad de conocer a gente o encontrar nuevos amigos. Pero añadía que “hay muchos riesgos y el problema puede venir cuando se cuelgan fotos de menores o se incluyen datos privados e íntimos”.

En la actualidad se están preparando una serie de medidas para proteger sobre todo a los jóvenes, teniendo en cuenta que esas redes han surgido de una forma rápida y no existe normativa “por lo que los problemas que acarrean son desconocidos para muchos”. Por ello, se están poniendo en marcha diferentes  medidas legislativas. En este sentido, recordó una serie de problemas que se plantean sobre la privacidad en relación con insultos, acoso sexual, exhibición de fotos de adolescentes desnudos o semidesnudos, colgadas por ellos mimos, así como otros relacionados con prostitución, acompañamiento, llamamiento a la violencia, suicidios y otros problemas.

Terminó insistiendo en que hay que tener mucho cuidado en lo que se cuelga y, sobre todo, se recomienda “leer la letra pequeña antes de publicar nada, cuidar la lista de contactos y antes de agregar a alguien saber a quien lo hacemos y utilizar contraseñas seguras”. Y, por supuesto, si alguien piensa que está siendo víctima de acoso, denunciarlo inmediatamente.