Mesa petitoria de la AECC en el mercadillo de La Solana

        Aurelio Maroto

       La Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) multiplica su actividad por toda la provincia en busca de impulsar un leitmotiv de su génesis: la investigación. La Solana es una de las plazas más relevantes de la provincia, por cantidad de actos y de dinero recaudado, y este miércoles celebró su tradicional cuestación en el mercadillo. Una cita que reunió a una docena voluntarios y otros colaboradores que se afanaron en allegar recursos mediante varias huchas. El esfuerzo mereció la pena porque, según fuentes de la asociación local, se recaudaron 1.040 euros, muy por encima de los 700 del año pasado, de modo los organizadores han expresado su satisfacción por la buena acogida de la campaña. Además, el día era espléndido y el mercadillo es un hervidero, ideal para peticiones de esta naturaleza.

     La presidenta de la Junta Local, María Catalina de Lara, agradeció la colaboración de la ciudadanía, como de costumbre. “Aquí la gente siempre nos ayuda mucho y creo que podemos igualar o incluso superar los 700 euros de la última vez”, declaraba a los medios. Enfatizó el trabajo de los voluntarios, que se vuelcan cada vez que organizan eventos así. “En estas cosas lo que ganas es la satisfacción personal de ayudar”.

       A la cuestación asistió el gerente provincial de la AECC, Miguel Ángel Galindo, feliz por ver cómo la gente se vuelca con la institución. “Parece mentira, pero en tiempo de crisis la ciudadanía es mucho más solidaria, y con nosotros más”. “La gente ve que con investigación se curan enfermedades y lo hemos visto con la vacuna del covid”.

       Recordó que, en este momento, la AECC financia una predoctoral en el Hospital General de Ciudad Real, dos más en la UCLM y el gerente anuncia contactos con el rectorado para crear una cátedra de oncología. “El cien por cien de nuestras cuestaciones lo destinamos a investigación”, insiste. En este sentido, Galindo quiso poner en valor el papel del voluntariado, pieza clave en la actividad cotidiana de la AECC en toda la provincia. “Los voluntarios son los que ondean nuestra bandera; tenemos una capilaridad de setenta sedes locales y más de 260 voluntarios formados e informados”. “Es imposible que la asociación exista sin ellos y ellas”.

        También acudió por allí el primer teniente de alcalde, Luis Romero de Ávila, “Qué importante es tener personas que luchan por los que a su vez luchan contra el cáncer”. “Ganando un solo milímetro de sanidad, de ilusión y de esperanza estamos ganando mucho; quién no tiene en casa algún caso”. “Desde el Ayuntamiento estamos abiertos para lo que nos pidan”.