El alcalde, Eulalio Díaz-Cano, junto a la presidenta, Rosa Sánchez y la joven capitana de este año, Toñi Galindo

        Aurelio Maroto / Paulino Sánchez

       El popular Domingo del Ofrecimiento volvió a la ‘casi normalidad’, incluida la recaudación de la Patrona. La Virgen de Peñarroya recogió 20.120 euros, 4.400 más que el año pasado, en un día de tiempo espléndido que echó a la calle a miles de solaneros desde por la mañana. La imagen volvió a salir al pórtico de Santa Catalina, aunque tampoco hubo puja. Sin embargo, la ciudadanía se volcó en la entrega de donativos económicos.

       La jornada arrancó con la misa de las 12, incluida en el novenario que había comenzado el día anterior y que cada día se dedicará a un barrio de la población. Dicha jornada correspondió a los del Humilladero y Barranco. Celebró el párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, que en su homilía saludó especialmente al nuevo alcalde, Eulalio Díaz-Cano, destacando que haya comenzado su mandato coincidiendo con la venida de la Patrona. Por otra parte, se refirió a problemas sociales como las drogas, el alcohol y una nueva adicción: las redes sociales. El coro titular acompañó la celebración del oficio religioso, al que siguió el inicio del Ofrecimiento. Desde ese momento fueron innumerables las ofrendas y visitas de gente de toda edad y condición ante la Virgen, así como las fotografías delante de la carroza.

 

  Terrazas repletas de gente en la Plaza Mayor durante este Domingo del Ofrecimiento 

 

Por encima de las 23 horas se dio por finalizado el Ofrecimiento, con esos 20.120 euros antes citados, un 22 por ciento más que los 15.710 del año pasado. “El pueblo se ha volcado con su Patrona; se nota que tenía ganas de verla en la plaza”, ha dicho la presidenta de la cofradía, Rosa Sánchez, en declaraciones a Radio Horizonte. La satisfacción es total, y no solo por la recaudación. “Hay que agradecer el comportamiento de la gente porque no ha habido aglomeraciones en ningún momento”.

          El dinero recogido supondrá oxígeno económico para la cofradía, aunque la presidenta recuerda que tiene su destino. “La Virgen tiene sus gastos fijos y el dinero se invierte en muchas cosas”. Por ejemplo, se está arreglando el manto morado y se proyecta arreglar otro, así como los candelabros. También se ha remozado el cuero que cubre el cochecillo de viaje, aunque en este caso ha sido gracias a una donación particular. Rosa Sánchez quiso enfatizar la emoción de la Junta Directiva viendo cómo los solaneros siguen entregados con su Patrona. “Impresiona ver cómo llegan jóvenes y mayores a dar sus donativos”. Y aprovechó para recordar que el novenario seguirá durante toda la semana, aunque no acabará con la procesión dominical, tal como se había anunciado con antelación.