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Jugada

Un momento del partido entre el Quesos La Casota y el Granada                                         Foto: GACETA

         Aurelio Maroto

Dicen que uno aprende a base de cornadas. Y el mundo del fútbol es un ejemplo paradigmático. El Quesos La Casota-FF La Solana sufrió una ‘cogida’ de grandes proporciones este miércoles. El morlaco era de cuidado: el Granada, un miura que embistió sin cesar y solo pudo derribar a las amarillas en el último suspiro. El 2-3 no fue ninguna injusticia, ya que las nazaríes exhibieron su enorme potencial, pero ganar sobre la bocina suele ser un golpe de suerte.

           Las jugadoras de David Peinado plantearon el mejor partido que podían. Se erizaron atrás para frenar el empuje inicial del Granada, con una presión brutal. Había que capear el temporal a base de defender con uñas y dientes, tapando grietas sin cesar. La primera parte fue eso, un dominio abrumador de las visitantes, que movían el balón sin tregua, buscando zonas de enganche por dentro y abriendo a banda. Allí, el ‘10’ granadino, Raquel, se convirtió en un puñal muy difícil de frenar, y la ‘8’, Pamela, en la directora de orquesta. Al final, ellas fueron las goleadoras. La Solana apenas visitó el área contraria en la primera mitad, que terminó con 0-1, gol de Raquel en el minuto 34.

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Las amarillas celebran el gol del empate de Paula                                                             Foto: GACETA

           La segunda parte acabó siendo una locura. El empate de Paula a los 6 minutos soliviantó el panorama. El Granada dudó y el encuentro entró en un formato más abierto donde las amarillas ya se asomaban con más soltura a la portería de Sandra. También las andaluzas, que necesitaban el triunfo como el comer. A falta de un cuarto de hora, la desesperación visitante encontró premio gracias a una desgraciada acción de Norma, que no atrapó un balón franco y el rechace lo aprovechó Pamela para marcar a placer.

          El Granada pudo sentenciar, pero no lo hizo y llegó el empate de Gabrielle Ngaska, tras cabecear un centro desde la derecha. Era el minuto 87 y sonaba a premio gordo. Pero un cabezazo de Pamela sin aparente peligro acabó dentro cuando el reloj marcaba el minuto 90. Una lástima.

          David Peinado, resignado, lamentaba la forma de perder. “Tenemos que aprender de estas cosas; nos han condenado pequeños errores que en esta categoría se pagan”. El técnico no ponía ningún pero al esfuerzo de sus jugadoras, que se vaciaron ante un rival que calificó “de otra categoría”. “El Granada solo tiene como objetivo el ascenso y si no lo consigue será un gran fracaso para ellos”. “Nosotros jugamos en ‘otra liga’”.

  Sin tiempo para lamerse las heridas, ya toca pensar en el Málaga, que el domingo visitará La Moheda (12 h.). “Ese partido es clave y necesitamos ganar o al menos mantenernos por encima de ellas en el golaverage” (el FF La Solana ganó en Málaga 0-1). Para ese partido ya debe estar la chilena Sofía y otro fichaje más, una jugadora americana que ya estuvo presente en La Moheda.

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