Imprimir 

Patricio Peinado y Meshack Esun

Patricio Peinado estuvo acompañado por Meshack Esun en la rueda de prensa                                Foto: GACETA

           Aurelio Maroto

           La Moheda ultima los preparativos para reabrir sus puertas al fútbol de competición. Este domingo, a las 7 de la tarde, el CF La Solana recibirá la visita del CD Villacañas, que jugará en el otro subgrupo de Tercera División. Primer amistoso para los amarillos, que mezclan la ilusión de reunirse con su afición y la incertidumbre que genera la situación sanitaria, que obliga a implementar medidas nunca vistas hasta ahora.

            El presidente, Patricio Peinado, ha comparecido en rueda de prensa para pedir el apoyo de la hinchada, más importante que nunca, y también comprensión ante una serie de limitaciones que deben, y quieren, asumir. “Vamos a hacer lo imposible por cumplir el protocolo sanitario a rajatabla”, declaró ante los medios.

           El máximo mandatario amarillo insiste en que el club se está volcando para minimizar riesgos. Todos los jugadores fueron sometidos a test de sangre y entrenan a puerta cerrada, mientras la Junta Directiva se afana en desinfectar las instalaciones y preparar el acceso de aficionados al estreno de pretemporada. Un trabajo extra a fin de aprobar un examen para el que intentan ser aplicados. “Hemos señalizado las gradas con los asientos donde la gente se puede ubicar, respetando la distancia entre butacas, y pondremos sillas alrededor”. Insistió en que “el fútbol hay que verlo sentado, no se permite estar de pie”. Por supuesto, será obligatoria la mascarilla en todo momento y los aficionados serán sometidos a control de temperatura a la entrada. También habrá geles hidroalcohólicos repartidos por el estadio.

 

           Una limitación importante será para los niños, que se contaban por docenas cada domingo en La Moheda, enfundados en sus camisetas amarillas. De momento, solo podrán entrar si van acompañados y ocupan un asiento como el resto de aficionados. Por tanto, tendrán que pasar por taquilla. Esta circunstancia disgusta especialmente a la directiva, pero no puede hacer otra cosa. Y otra restricción relevante es el bar. Este domingo no se abrirá ninguna de las dos barras del campo, de acuerdo con la normativa.

          Patricio Peinado acepta todos estos ‘obstáculos’, sin rechistar, si ayudan a evitar contagios, aunque confía en que la situación se suavice. “A ver si levantan un poco la mano para el próximo partido, que será el Trofeo Rosa del Azafrán”. Pero ahora no queda otra que cumplir las normas para evitar males mayores. Un aumento de los contagios afectaría tarde o temprano a todos, el fútbol incluido.

Usamos cookies para mejorar su experiencia en nuestra web. Más información en: Guía de uso de las cookies.

  Acepto el uso de las cookies en este sitio.