Elena Jaime y Luisa Márquez durante la rueda de prensa                                   Foto: GACETA

           Aurelio Maroto

        El grupo municipal de Ciudadanos acaba de renunciar a sus dos sillones en el Patronato de la Fundación Benéfica ‘Legado Bustillo’ de La Solana. Las concejalas Luisa Márquez y Elena Jaime han confirmado que han presentado su dimisión formal de forma irrevocable. Aluden motivos “varios” y a una decisión “meditada durante meses”.

 Evitando en todo momento entrar en detalles, habida cuenta del acuerdo de confidencialidad establecido, y que pretenden respetar, aseguran que se han sentido “ninguneadas e ignoradas”. Según Elena Jaime, la gota que colmó el vaso fue una condición extraordinaria con los trabajadores del Centro Especial de Empleo durante el estado de alarma. “La confirmación la tuvimos vía telefónica al interesarnos por la licitación del servicio de conserjería”. Sin profundizar más, admitió que el presidente de la Fundación [Luis Díaz-Cacho] les pidió disculpas, alegando la urgencia de la situación, pero han resultado insuficientes. Habló de reuniones donde “se llevaban documentos importantes para votarlos sin opción de estudiarlos de forma pormenorizada”. “O decisiones que cuando salen a la luz no se corresponden con lo acordado”. A su juicio, son razones suficientes para irse, al haberse sentido “como meras espectadoras”, sobre todo por la mayoría del grupo de concejales del PSOE gracias al voto de calidad del presidente.

Igualdad de oportunidades

          Luisa Márquez, a la sazón portavoz municipal de CS, reconoció que no es la primera vez que sopesan dejar la Fundación. Se refirió a la intervención de un vecino en un pleno pasado quejándose de las bases de empleo o de las baremaciones. “Lo que expuso tenía sentido porque habló de igualdad de oportunidades”. Según dijo, son muchos los vecinos que les cuentan incidencias que no conocían como patronas.

Márquez entiende que algunos vecinos no comprendan esta renuncia y que la mejor forma de cambiar las cosas es desde dentro. Cree que no es el caso. “Recuerdo cuestiones debatidas que han trascendido con matices no acordados”. En resumen, sostiene que es mejor no estar que hacerlo “en contra de nuestras convicciones”. “Desde fuera pelearemos por lo que nos dicta nuestra conciencia”. “La Fundación Legado Bustillo tiene que ser el reflejo de la sociedad solanera y no el antojo al gusto político de nadie”.