Iago Novoa durante la presentación de Zaska en La Solana                                                    Foto: GACETA

            Aurelio Maroto

          Iago Novoa (Lugo, 1994) es un joven inquieto con alma de emprendedor. Formado académicamente por medio mundo y consciente de que las startups son el futuro, sino el presente, acaba de parir una idea tan novedosa como atractiva. Se llama Zaska y, en síntesis, es una aplicación para facilitar la venta de productos online, con la particularidad de que está orientada a la restauración y al pequeño comercio, sectores azotados desde hace tiempo por las grandes plataformas virtuales y rematados por la crisis del Covid.

Este miércoles, el auditorio del Palacio Don Diego acogió la presentación de Zaska, que debuta así en Castilla-La Mancha. La expectación fue grande porque reunió a medio centenar de hosteleros y comerciantes de La Solana. “Los empresarios buscan una solución de este tipo y están muy receptivos; es cuestión de empezar y cuando vean cómo funcionan irán enganchándose”, señaló Iago Novoa en declaraciones a Radio Horizonte.

         Durante la presentación, su creador explicó las bondades de una herramienta de fácil manejo, bastante intuitiva y llena de posibilidades. “Zaska es una multiplataforma que ayuda a la digitalización del mundo de la restauración y del comercio de una manera muy sencilla”, argumenta. Hay dos aplicaciones básicas, una para compradores y otra para la gestión, llamada Zaska Manager, que se pueden manipular directamente desde un móvil, una tableta o un ordenador.

Hosteleros y comerciantes conocieron las ventajas de novedosa aplicación                     Foto: GACETA

           Novoa admite que cualquier población menor de 20.000 habitantes puede complicar la adaptación a este sistema de compraventa online, ya que sus ciudadanos no están tan habituados a operar en la Red cosas tan simples como un menú de restaurante o una camisa que –quizás- se vende en la tienda de al lado. Sin embargo, el creador de Zaska prefiere adelantarse a un futuro que ya es inmediato. “Todo cambia muy rápido y la gente se está adaptando muy deprisa a las nuevas tecnologías”. “El objetivo es que el comprador tenga en su bolsillo todas sus tiendas, incluidas las de su pueblo, de modo que puedas comprar en tus comercios de toda la vida con la máxima facilidad”.

           Se trata de concepto que ha eclosionado a cuenta, precisamente, del coronavirus y la crisis sanitaria que ha desatado, trayendo consigo otra crisis económica. “Esta idea se ha agrandado más y muchos se han comprendido que no estar en internet es como no existir”. “Está bien tener tu tienda física, pero es imprescindible también tener tu dirección online, y da igual que estés en una aldea o en una gran urbe”.

  La aplicación llega sin coste para los empresarios que quieran adherirse, al menos el primer año. Es aquí donde entran las administraciones públicas, un cauce necesario para impulsar la llamada ‘reconstrucción’. “Gracias a instituciones como el Ayuntamiento de La Solana podemos dar un año gratuito, sobre todo por las circunstancias actuales, donde la situación del comercio no es la mejor”, argumenta Novoa. Y es ahí donde entran las startups. “Estamos para ayudar a solucionar problemas y para nosotros también es una responsabilidad”. “Nuestro objetivo es añadir valor”.