José Araque -centro- junto al presidente Page, consejeros y alcalde en su fábrica               Foto: GACETA

           Aurelio Maroto

Quesos La Casota ha mantenido su producción durante lo más duro del confinamiento, incluso ha mejorado su mercado en el sector de productos gourmet, especialmente en zonas como Cataluña. Así lo confirma su propietario, José Araque, que este lunes recibió la visita Emiliano García Page en su fábrica de La Solana.

       El presidente regional llegó escoltado por el consejero de Agricultura, el solanero Francisco Martínez Arroyo, y el de Sanidad, Jesús Fernández, amén del alcalde, Luis Díaz-Cacho. En su recorrido por la quesería, Page se interesó a propósito de cómo La Casota ha afrontado la crisis sanitaria, expresando su apoyo total a la industria agroalimentaria, sin duda un pilar básico en la economía de Castilla-La Mancha.

         En una entrevista concedida a Radio Horizonte, José Araque agradeció la visita de buena parte de la plana mayor del gobierno autonómico y explicó cómo ha vivido su empresa estos meses. Como sector esencial relacionado con la alimentación, Quesos La Casota no ha parado. “Nos pilló en un buen momento porque teníamos las cámaras vacías [de quesos]”. “Hemos estado elaborando lo mismo de siempre”, asegura.

          Araque reconoce que juegan con algunas ventajas, por ejemplo tener cerrados tres acuerdos de venta a El Corte Inglés, sobre todo con su marca ‘Querta’, no tanto con el ‘Marantona’, buque insignia de la firma. “Tenemos cadenas gourmet que incluso han subido sus pedidos”. Por ejemplo los supermercados Sánchez Romero, los más caros de España. Y es que un producto gourmet como el queso manchego de La Casota mantiene abiertos sus canales de entrada. “En Cataluña estamos creciendo muchísimo, sobre todo en tiendas de alimentación”. Ese mercado de alto poder adquisitivo ha permitido mantener el tipo, y de paso la plantilla de la quesería sin necesidad de ERTE. Las 14 nóminas actuales han seguido en pie.

Familia Araque en el complejo hostelero de la Plaza Mayor                                                      Foto: GACETA

Hostelería, la otra cara

        El único ‘pero’ es la hostelería, que lógicamente no ha tenido tirón. El empresario admite que han perdido en torno a un 40% de venta en un sector “que no imaginamos lo mucho que mueve”. Precisamente el negocio hostelero es la otra vertiente que gestiona la familia Araque, con La Casota Gourmet, que desde 2013 engloba un complejo de cafetería, tienda, restaurante y hotel en la Plaza Mayor de La Solana. Aquí sí se gestionó un ERTE entre los 9 empleados de plantilla estable.

            José Araque dice que las pérdidas han sido importantes tras dos meses largos de parón absoluto, como en el resto del gremio. El 18 de mayo decidieron reabrir la terraza “más que por lo que puedas ganar, abrimos por arrancar de nuevo y dar confianza a la gente”, argumenta. Admite que hasta el cierre obligado “íbamos muy bien, creciendo mucho a nivel de restaurante y cafetería”. Ahora espera ir recuperando la confianza de la gente poco a poco, aunque cree que hará falta tiempo. “La gente no va a salir como antes y este año tendremos pérdidas”. Además, ya han dado de alta a 2 de los trabajadores y es previsible que rescaten más en las próximas semanas.

            Con todo, José Araque prefiere mirar el futuro con optimismo y lanzando un mensaje claro a la ciudadanía, sobre todo viendo determinadas imágenes en televisión ante la reapertura del sector. “Mi consejo es que sean prudentes si no queremos volver para atrás”.