Un remolque descargando en la Cooperativa Santa Catalina                                                                  Foto: GACETA

Gabriel Jaime

La Cooperativa Santa Catalina albergará una producción cercana a los treinta millones de kilos que llenará su bodega. La campaña se está desarrollando con normalidad y con uvas de una gran calidad que permitirán elaborar buenos caldos, según ha avanzado su presidente, Gregorio Martín-Zarco. El objetivo de la entidad es conseguir vinos de calidad y mantener la línea de crecimiento de la empresa.

Las previsiones indican que se superarán las cifras de años anteriores, rondando los treinta millones de kilos de molturación. Las entradas diarias son importantes y oscilan entre los 1,2 y 1,3 millones, lo que propiciará que se llene la bodega tras concluir la vendimia. Esa es la estimación del presidente, Gregorio Martín-Zarco, que habla de una buena campaña en producción y también en la elaboración de vinos de calidad. La uva está madurando muy bien, está subiendo el grado y el fruto llega en excelentes condiciones.

La Cooperativa Santa Catalina contará con diversas variedades como Verdejo, Macabeo, Airén, Tempranillo cencibel, Sirah, Moscatel… y volverá a producir el vino parcialmente fermentado bajo la denominación de Viñagal. Este producto fue la sensación de la pasada campaña agotándose toda la producción en poco tiempo, por lo que este año se va a incrementar el número de botellas considerablemente.

Además, los diferentes premios obtenidos el año pasado en varias de sus marcas, van a servir de acicate para esmerarse en los caldos de esta campaña. Martín-Zarco asegura que la línea de calidad de los vinos tiene que subir cada temporada, con el objetivo de conseguir caldos de calidad y crecer en producción y como empresa.

El presidente espera que se mantengan los precios del vino en las exportaciones, con el fin de que continúe esa línea de valorización de nuestros caldos en el mercado exterior. Al respecto, Martín-Zarco señaló que aunque bajaron las exportaciones, se mantuvo el volumen económico por el buen reconocimiento de los vinos. En cuanto al precio de la uva, reconoció que está bajo, argumentando que debería oscilar en una orquilla de entre 3,50 y 4 pesetas.

Finalmente, destacó el papel que desempeñan los socios de la entidad, indicando que son la base fundamental para la construcción de una buena cooperativa.