Peinado (centro) en su presentación como número uno de IU             Foto: GACETA

Aurelio Maroto

“Nuestro objetivo es la alcaldía y vamos a por ella”. Bernardo Peinado se expresó con esa contundencia durante su bautizo como candidato de Izquierda Unida para las próximas municipales. Su partido, por tanto, no arranca timorato a la hora de marcarse objetivos. Quiere lo máximo, y lo máximo es gobernar La Solana a partir de mayo. Se siente arropado no sólo por su partido, del que recibió encendidos elogios, sino también por una ciudadanía que, según él, estaría harta de lo que llamó “pinza” entre PSOE y PP. Los primeros por abusar de una “mayoría absolutista”, y los segundos por seguirles la corriente. Eso sí, aclaró que, para lograrlo, hace falta “una revolución democrática”. No aclaró nada sobre el resto de la candidatura, y evitó valorar la personalidad de sus dos oponentes, Luis D-Cacho y Francisco Nieto. Se limitó a decir que sus proyectos políticos son “más de lo mismo”.

Ese es, en resumen, la esencia de lo que ayer dijo el hombre encargado de capitanear la nave de un partido que comienza el año electoral exhibiendo músculo. Prueba de ello fue la presencia del coordinador provincial, Miguel Ramírez, que incluso habló de las expectativas que el jefe máximo de la coalición, el argamasillero Cayo Lara, tiene depositadas en La Solana.

Sin embargo, el primero en hablar fue Cruz Naranjo, portavoz de la Asamblea Local. Como quiera que Radio Horizonte avanzó hace días que Bernardo Peinado sería el candidato, estimó conveniente que tenía que pedir disculpas por ello al resto de medios de comunicación. Después habló de él como el mejor candidato posible “un hombre que respira política y su trabajo así lo avala”.

El coordinador provincial llegó con un discurso también optimista “presentaremos una lista que tendrá un apoyo importante para conseguir la alcaldía”. Ramírez se basa un trabajo bien hecho durante estos cuatro años con una oposición contundente y presentando alternativas. En su opinión, esa labor merece la confianza de los solaneros “ante un PSOE agotado y un PP incapaz”.

A nivel autonómico, el coordinador provincial insistió en una necesidad: romper el bipartidismo en las cortes regionales. Dijo que casi tres décadas de gobiernos socialistas “no han sacado a CLM del furgón del cola”. Es más, llamó caciques a los actuales gobernantes “salimos de los caciques de la dictadura para meternos con otros caciques en estos 28 años”. Según dijo, el modelo ha fracasado por estar basado en el ladrillo y la corrupción, y puso ejemplos como CCM, Seseña o el Aeropuerto de Ciudad Real.

Bernardo Peinado comenzó expresando su gratitud a la asamblea local de IU por haber depositado la confianza en él, y en especial a los solaneros que hace cuatro años confiaron en un proyecto “basado en la dignidad, la verdad y la coherencia”. Recordó que en 2007 abrieron brecha, pero no la suficiente “para que entre todo el aire fresco que necesita el Ayuntamiento”. Cuatro años –dijo- donde se han enfrentado a “la pinza entre la mayoría absolutista del PSOE y un PP consentidor”.

En cuanto a la próxima cita de mayo, Peinado habló de un “compromiso renovado”. La diferencia es que ya no se conforman con tener representación, ni siquiera con aumentarla “queremos la alcaldía para demostrar que se pueden hacer las cosas de otra manera”. Meta ambiciosa que en IU creen posible a tenor de sus declaraciones, aunque para lograrla –añadió- “hace falta una revolución democrática basada en la participación ciudadana, la libertad y el empleo”.

No avanzó nada concreto sobre el programa electoral, solo que “estará basado en los derechos de las personas y en pedir transparencia”. Al respecto, lanzó el guante “pedimos un debate electoral entre los candidatos”. Una petición que les harán llegar por escrito a socialistas y populares. Tampoco adelantó nada sobre la candidatura ni valorar la personalidad de sus dos adversarios en lo alto de las listas de PSOE y PP, Luis Díaz-Cacho y Francisco Nieto. En este sentido, prefirió ser respetuoso “no valoramos a las personas”, aunque sí añadió que sus proyectos políticos “son más de lo mismo”.