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La ciudad

         Paulino Sánchez

Diversos han sido los cambios introducidos este año en los cultos del Día del Señor en la localidad. Los nuevos párrocos han acordado de nuevo que la celebración retorne a la mañana, tras 16 años celebrándose por la tarde. Por otro lado antes de la procesión se celebró una misa conjunta en la parroquia de Santa Catalina. Esas han sido las dos novedades de una celebración que se iniciaba el sábado con la Vigilia de la Adoración Nocturna en la parroquia de Santa Catalina, corriendo a cargo del consiliario de la misma Candelo López.

   A  las doce del mediodía del domingo comenzaba en la parroquia de Santa Catalina una misa concelebrada por los párrocos, a la que asistieron los niños y niñas de primera comunión, así como numerosos fieles que abarrotaban el templo.

   A la conclusión de la misma se iniciaba el desfile procesional que abrían, tras la cruz alzada, los 151 niños y niñas de primera comunión, que portaban bandejas con pétalos de flores, que fueron dejando en el suelo de todo el recorrido.

   Directivos de cofradías y hermandades seguían a los niños, desfilando seguidamente la Banda Municipal de Música, que bajo la dirección de Ángel Sancho ofreció en el itinerario diversas marchas procesionales.

   Continuaban las filas de acompañantes, así como las asociaciones eucarísticas de la localidad. Las Marías de los Sagrarios, seguidas de las secciones de la Adoración Nocturna de hombres y mujeres,  con sus respectivas banderas.

   El estandarte de la Sacramental de Caballeros, precedía a las dos filas de los hermanos que  portaban sus hachones de cera, alumbrando a la Custodia, que era portada en una carroza, dentro de su artístico templete y bellamente adornada con numerosas flores.  Detrás de la carroza marcha el  clero de las parroquias, seguido de las autoridades locales encabezadas por el alcalde Diego García Abadillo, siendo numerosos los fieles que presenciaron el desfile, que en muchos balcones se encontraba adornado con numerosas colgaduras.

   Al finalizar la procesión se procedía a impartir la bendición y posteriormente la reserva, con lo que se daban por finalizados los cultos.

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