Agustín Sánchez, entrenador del FF La Solana              Foto: GACETA

        Aurelio Maroto

       El Quesos La Casota-FF La Solana vive con bastante normalidad su descenso a Tercera RFEF. Aunque no deja de ser un disgusto, el ambiente que vivía el equipo el domingo tras el sonrojante 0-5 frente al CD Tenerife no era precisamente de duelo. Solo el entrenador y los directivos estaban algo más serios, seguramente por la mala forma de despedir el campeonato, habida cuenta que el descenso ya estaba asumido. “Hoy la actitud no ha sido la mejor porque las jugadoras han decidido tomarse unas vacaciones anticipadas”, declaraba Agustín Sánchez al término del encuentro.

Desde aquel ascenso histórico a Reto Iberdrola en la burbuja de Las Rozas (2020), el FF La Solana ha peleado contra gigantes. Se vio la temporada pasada, con un descenso matemático que solo salvó la renuncia del Betis B, y se ha visto en la presente campaña. “Nos han faltado puntos claves en determinados partidos que teníamos bien encaminados; nos faltaba punch arriba y no nos ha dado para mantenernos”, admitía Sánchez en declaraciones a Radio Horizonte. En realidad, el gran problema es que el club tiene unas limitaciones por razón de la categoría donde está y los rivales a los que se enfrenta: Elche CF, Córdoba CF, Getafe CF, Málaga CF, Cacereño o filiales del Valencia CF o el CD Tenerife son algunos ejemplos. Por no hablar de los 7 viajes a Canarias que ha habido que afrontar. De una forma o de otra, el fútbol femenino está haciendo una selección natural donde sobreviven las ciudades de mayor tamaño y los clubes con más ‘riñones’ en las categorías superiores. Y Segunda RFEF lo es.

                                  El equipo ha despedido la temporada con un dolorosa derrota en casa (0-5)       Foto: GACETA

Seguir siendo un referente

“Es casi un milagro que un club como el nuestro juegue en esta categoría”, decía el técnico. En cualquier caso, añadía que la historia no se puede traicionar. “La Solana siempre ha sido un club referente en fútbol femenino y lo seguirá siendo; han sido varios años en una categoría muy bonita pero también muy difícil, así que tenemos que tener la cabeza alta e intentaremos volver a ella”.

La gran cuestión es de qué manera. De momento, el entrenador madrileño está feliz en La Solana. “Estamos hablando; yo estoy contento con el club y el club me trasmite que está contento conmigo”. “De una forma u otra seguiré vinculado y me siento con ganas para seguir aportando”. Su receta es clara para la próxima temporada. “Tenemos que mantener una estructura potente e intentar mejorar lo que hemos hecho mal para seguir el camino que dicte la junta directiva”. ¿Y cómo se consigue eso? “Hay que intentar hacer un equipo con arraigo en la comarca, con gente representativa de la zona”. “Hasta ahora teníamos el 95 por ciento de jugadoras de fuera por el hecho de jugar en una categoría muy alta y porque no había muchas jugadoras de alto nivel por aquí, pero tenemos que recuperar esa base con gente representativa de la zona”. “Necesitamos chicas jóvenes, con hambre y generar otro círculo como el que hemos tenido”.