Imprimir 

IMG 3633

Nazarenos y penitentes minutos antes de suspender la procesión de la Vera Cruz                                                                Foto: GACETA

          Paulino Sánchez

La insistente lluvia protagonizó las tardes-noches del Jueves Santo y el Viernes Santo en La Solana, impidiendo la salida de las procesiones de la Vera Cruz, el jueves, y del Entierro de Cristo, el viernes. Sin embargo, el clima sí permitió la salida de Jesús Rescatado en la madrugada del viernes.

Media hora antes de la nueve de la noche del Jueves Santo llegaba un nuevo aguacero, que fue aumentando y obligó a la Junta Directiva de la Vera Cruz y Virgen de la Esperanza a informar a los fieles presentes en el interior de la parroquia de Santa Catalina sobre un primer aplazamiento de media hora. Pero la lluvia no cesaba y tras una reunión de urgencia en el mismo templo se decidió suspender definitivamente el desfile. Así lo hicieron público desde el altar mayor la presidenta de la hermandad, Miguela Martínez, y el párroco Benjamín Rey. En ese momento eran muchos los penitentes y nazarenos que se encontraban dentro del templo preparados para la salida.

IMG 3666

Momento de la suspensión oficial de la procesión con la directiva de la Vera Cruz en pleno                                                Foto: GACETA

No se pudo lucir en la calle el nuevo paso del Niño, así como el gallardete que iba a estrenar y la corona con nuevo baño de oro del Cristo del Amor, aunque éste sí había desfilado en la noche del Miércoles Santo durante el Vía Crucis.

El disgusto fue grande, máxime cuando era la última procesión de Miguela Martínez al frente de la cofradía, pero no hubo más remedio que resignarse y pensar ya en el año que viene.

Santo Entierro

Paragias en laermita de Santa Quiteria

Acceso a la ermita de Santa Quiteria antes de suspender el desfile                                                                                    Foto: GACETA

La lluvia, que había dado tregua en la madrugada y primeras horas de la mañana del viernes, regresó en las primeras horas de la tarde y no cesó, sino que incluso arreció, y obligó a suspender también la procesión del Santo Entierro de Cristo, prevista para las 20 horas.

En el interior de la ermita de Santa Quiteria estaban preparados los seis pasos del desfile procesional, ya que los dos de la Virgen de las Angustias se habían trasladado durante la mañana, al igual que el año anterior. Numerosas personas, algunas vestidas con túnicas, así como portadores y costaleros se habían dado cita en la ermita, aunque la lluvia no cesaba y la previsión tampoco acompañaba. El presidente del Santo Sepulcro, José Merino, comunicó que la procesión se suspendía. El párroco de San Juan Bautista de la Concepción, Eduardo Guzmán, dirigió a los portadores una oración.

Se da la circunstancia de que también era la última procesión de José Merino como presidente de la hermandad del Sepulcro y Soledad de la Virgen. Precisamente la gran novedad era la salida a hombros por primera vez de la Soledad, para lo que se había adaptado un chasis de aluminio y suelo nuevo, con un sistema de tablillas a hombros a modo de trabajaderas.

Tampoco pudieron lucir los estrenos de las cofradías que organizan desde la Virgen de las Angustias, que tenía previsto estrenar dos farolas guía y nuevas faldas para el paso de la titular.

Usamos cookies para mejorar su experiencia en nuestra web. Más información en: Guía de uso de las cookies.

  Acepto el uso de las cookies en este sitio.