Manolo Sancho se ve capacitado para revertir la situación del equipo                                                                   Foto: GACETA

             Aurelio Maroto

            Manolo Sancho vive sus peores momentos al frente del club que devolvió a Tercera División. El fútbol es pendular y las cañas se han convertido en lanzas. La Moheda aprieta y hay pavor al fracaso. La Junta Directiva no quiere ni pensar en un posible descenso tan sólo una temporada después. La afición tampoco.

            La semana pasada hubo reunión al más alto nivel donde la directiva ratificó al míster. Y ya se sabe que una ratificación, a menudo, se puede confundir con ultimátum. Sancho, hombre de fútbol, es plenamente consciente de su rol en momentos así. “Está claro que si los resultados no llegan suele caer el entrenador; estoy preparado”. Pero no va a rendirse. No ahora. “Trabajo con la misma ilusión y confianza del primer día y también estoy preparado para sacar al equipo de ahí”.

            En una entrevista concedida a Radio Horizonte tras la derrota en Guadalajara, el joven entrenador solanero recuerda que el equipo rozó la proeza en el Escartín, a pesar de viajar con sólo 12 jugadores de la primera plantilla. “Competimos 95 minutos a gran nivel, con grandes sensaciones y la misma personalidad que en La Roda o en otros partidos fuera de casa”.

            El problema es La Moheda, donde el equipo está naufragando. Las losas de Tarancón (0-3), Quintanar del Rey (2-4) y, sobre todo, At. Ibañés (0-5) pesan toneladas. Presión, nervios, fragilidad mental y, no nos engañemos, jugadores que no dan el nivel, explican el fracaso ante la afición, con las honrosas excepciones de At. Tomelloso (1-0) y At. Albacete (1-0). A ese carrusel de derrotas y goleadas se ha sumado otro molesto invitado: las lesiones. Una legión de ausencias que han diezmado, sin duda, el rendimiento del equipo, amplificando la necesidad de buscar refuerzos.

            Sin embargo, Manolo Sancho ha apelado a la tranquilidad, al menos esta semana. “Lo principal es hablar de fútbol y nada más”. “Debemos fijarnos únicamente en el partido contra el Azuqueca”. Aunque la semana pasada se habló de posibles movimientos en la plantilla, el técnico ha ordenado frenar cualquier operación, por ahora. Insiste en que no conviene precipitarse y que los mejores fichajes serán aquellos jugadores que se puedan recuperar. Para recibir al Azuqueca volverá seguro Javi Grillo, y se espera que también lo hagan David Sevilla, Almarcha y Diego Sevilla, entre otros. Algunos no llegarán en plenitud, cosa que ahora importa poco. “Es hora de arriesgar y lo haremos; tenemos necesidad y muchas ganas”.

            El trabajo será físico y mental a partes iguales. Un exceso de excitación sería contraproducente. “Debemos ser inteligentes y maduros en el campo, pero es hora quitarnos el disfraz con el que estamos jugando en La Moheda”. La Solana-Azuqueca (La Moheda, 16:30 h.) suena a punto de inflexión, para bien o para mal.