María Pérez y Gregorio Sánchez durante su intervención     Foto: GACETA

           Aurelio Maroto

Cuestión de dinero, de mucho dinero. La nueva intentona de la empresa Quantum Minería para hacerse con una masa de agua no catalogada en la cuenca alta del Guadiana responde a una estrategia económica que va más allá de la mera explotación minera. Así opina Gregorio Sánchez, concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Valdepeñas, que ofreció una rueda de prensa en La Solana para apoyar la próxima propuesta plenaria del grupo municipal de IU contra las llamadas ‘Tierras Raras’, reactivado últimamente por esta empresa. La concejala solanera María Pérez recordó que ya han presentado varias iniciativas en plenos anteriores y vuelven a insistir con otra moción que busca el consenso de la Corporación para elevarlo a la Confederación Hidrográfica del Guadiana, organismo encargado de autorizar o no el uso de esa masa de agua.

Gregorio Sánchez, conocedor de este proyecto minero desde su misma génesis, no ocultó su sorpresa ante la admisión a trámite del expediente por parte de la CHG después de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) negativa, el ‘no’ oficial de la administración regional y, sobre todo, de la ciudadanía. “No entendemos qué intereses que se esconden detrás”, dijo. “Nos llama la atención que el gobierno del PP iniciara en su momento los trámites y la posibilidad de que Quantum montara una minería a cielo abierto y contaminante, y que sea ahora otra administración del PP como la CHG quien permita que el proyecto siga adelante”.

Básicamente, la empresa minera quiere que se catalogue esa supuesta masa de agua y, llegado el caso, hacerse con los derechos para uso privado, que podría ser explotación minera o, en su defecto, para su venta pura y dura a particulares. El concejal de IU, que insistió en la actuación contundente de los grupos municipales de su partido allí donde tienen representación, cree que iniciar este proyecto minero sería desastroso para el medio ambiente y la industria agroalimentaria de la zona. “Afectaría a las denominaciones de origen del vino, del aceite o del queso manchego, y en unos años se llevarían todo dejando tierra arrasada”.

A preguntas de los periodistas, Gregorio Sánchez admitió que detrás de este proyecto hay mucho dinero. “Esto cotiza en bolsa y si Quantum Minería consigue la licencia se dispararían sus acciones; creo que ni siquiera desean la explotación minera, sino venderla a otra empresa de capital extranjero; para ellos es un tema estratégico”.