Manoli González cerró el cochecillo y entonó los 'vivas' a la virgen                   Foto: GACETA

         Paulino Sánchez

       La convalecencia del alcalde de La Solana, Luis Díaz Cacho, tras una reciente operación quirúrgica, ha hecho que por primera vez haya sido una mujer quien ha cerrado el cochecillo de viaje de la Patrona, la Virgen de Peñarroya, en su marcha al Castillo. La primera teniente de alcalde y alcaldesa en funciones, Manuela González-Horcajo, ha sido la primera mujer en los muchos siglos de historia de esta cofradía que ha cerrado el cochecillo en el altar de la Plaza de Toros, donde es despedida la imagen Se trata de un privilegio ancestral de los primeros ediles tanto en su despedida en enero como en su recibimiento en septiembre de cada año.

        Una vez que la imagen llegó al altar, tras permanecer toda la noche acompañada de fieles en la ermita del Humilladero, fue entonado su himno, luego la alcaldesa depositó un beso a la Virgen y al Chatillo, dando los 'vivas' de ritual y se encargó de cerrar el cochecillo de viaje, ayudada por la Mayordoma de la cofradía, en este caso otra mujer, Gumer Romero, asimismo privilegio que mantiene quien ocupa ese cargo, mientras que la Banda Municipal interpreta el Himno de La Solana.

El joven capitán ante las autoridades y directivos de la cofradía                                               Foto: GACETA

    Los actos de despedida han consistido en el tradicional novenario, este año dedicado a los colegios, continuando en la noche del domingo el traslado procesional desde la Parroquia de Santa Catalina a la ermita del Humilladero, acompañando de la banda de cornetas y tambores de Jesús Rescatado, así como del baile de las tradicionales banderas en número de catorce, alabarderos que le dan guardia, Banda Municipal, el capitán de este año que es el niño de 11 años Gabriel Díaz-Cano Naranjo, la directiva encabezada por la nueva presidenta, Rosa Sánchez.

    La imagen desfiló con el manto de color fucsia y la corona real, con numerosas flores naturales que adornaban la carroza, marchando detrás el clero, autoridades locales y numerosos fieles, muchos de los cuales le acompañaron a lo largo de toda la noche en la ermita del Humilladero hasta la mañana del lunes cuando se iniciaba el traslado a su ermita del Castillo de Peñarroya.

    Aunque con anterioridad ya habían ocupado la primera tenencia de alcalde y, por tanto la alcaldía en funciones mujeres como Blasa Delgado y Cristina Fernández, no se había dado el caso de ausencia del alcalde.